lunes, 22 de mayo de 2017

HISTORIAS DE MOROS Y CRISTIANOS


  YA NO QUEDA NI ESPERANZA

UN SOLITARIO Y FAMÉLICO GATO, AFERRADO A LAS PIEDRAS, SEGURAMENTE CALIENTES POR EL SOL, BUSCANDO SU CALOR.

Ordoño de Asturias delega el gobierno del condado de Castilla, a Rodrigo, primer conde de Castilla. Año 850

Dentro del primer tercio de la nona centuria se levanta otra nueva línea de fortificaciones en la cumbre de la cordillera que separa las aguas del Ebro y las del Arlanza, asomándose a la cuenca de este último; corre desde Amaya, y pasa por Urbel del Castillo, Castillo de Moradillo de Sedano, va a Castillo de Rucios, Ubierna, Castillo de Monasterio de Rodilla, Poza, Castil de Peones y Oca. 
Por el mismo tiempo se levantan los castillos de Castil de Carrias, Cerezo, Ibrillos, Grañón, Pazuengos y Belorado, como barrera de contención contra las agresiones de los moros de Zaragoza y Toledo, que tan frecuentes fueron por aquella parte en este siglo. 
El nuevo rey Ordoño de Asturias, delega el gobierno de sus territorios fronterizos a gentes de la familia real, quienes tendrán gran libertad de acción a cambio de su fidelidad: su hermano Gatón será conde del Bierzo y su hermano o cuñado Rodrigo, conde de Castilla. El conde será el encargado de recaudar los impuestos, cobrar las multas e impartir justicia en sus territorios. En los primeros años de su gobierno se reanuda la repoblación de nuevos territorios bajo la acción de eclesiásticos y señores pero a partir del 860 el propio conde va actuar y repoblará Amaya.
Tras la victoriosa campaña contra Albelda (858), fortaleza de Musá II, los asturianos se debieron hacer con el control de multitud de fortalezas en la zona, como Cerezo de Río Tirón, Castil de Carrias, Ibrillos y Grañón. El condado de Castilla hacia el 860 se extiende hacia el sur por la Merindad de Sotoscueva, Espinosa de los Monteros, Bricia, Valdivielso, Mena, La Losa, Valdegovía y el Valle de Tobalina, y llegando por el este siguiendo el río Ebro hasta Puentelarrá y por el oeste hasta Brañosera y Aguilar de Campoo. 
La expansión del condado de Castilla hacia el sur y el este se produce aprovechando la debilidad del emirato de Córdoba y es ejecutada a instancias del rey Ordoño I por el conde Rodrigo. En la frontera riojana se van a conquistar diversas fortalezas y ciudades: Haro, Cerezo de Río Tirón, Castil de Carrias y Grañón. Y se fundan nuevas fortalezas (Frías, Lantarón). 
EXTENSIÓN DEL CONDADO DE CASTILLA EN EL AÑO 873: El condado de Castilla experimentó una gran expansión durante el gobierno del Conde Rodrigo. Además a partir de la sublevación del conde alavés Eglyon, Álava se incorpora al condado de Castilla aunque por breve tiempo. Fortalezas musulmanas eran Pancorbo, Cellorigo, Cerezo de Río Tirón, Castil de Carrias, Briones, Grañón e Ibrillos. Muy importante era la situación de Pancorbo. 
Parece seguro que a comienzos del gobierno de Diego Rodriguez (sucesor del conde Rodrigo), había dos posiciones castellanas que ya serían inamovibles: Pancorbo en manos castellanas y Cellorigo en manos alavesas. Por parte musulmana  Ibrillos y Grañón serán las dos plazas más importantes y no serán conquistadas hasta inicio del siglo X. El resto de fortalezas debieron cambiar de manos en multitud de ocasiones, pero es plausible que los castellanos poco a poco fueran afianzándose en algunas de ellas como Cerezo de Río Tirón y Castil de Carrias. Así permite al menos ser inducido de la actividad repobladora que se va a llevar a cabo en la zona de Oca.
ESTE PEQUEÑO ESCRITO LO HE RECOGIDO UN POCO DE UN SITIO Y OTRO POCO DE OTRO, SOLO CON EL FIN DE DAR A CONOCER Y DAR UNA PEQUEÑA IDEA DE LA IMPORTANCIA QUE ANTIGUAMENTE TUVO NUESTRO PUEBLO, LAS GENTES QUE LO POBLARON Y LAS LUCHAS  QUE SURGIERON ENTRE MOROS Y CRISTIANOS. 
 

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