CANTO AMARGO
Una tarde de verano
cuando los grillos cantaban,
tu venías solo, y con sentimiento,
tu pena mostrabas.
Buscabas consuelo,
llamaste a mi puerta,
y con alegría
yo te abrí resuelta.
Quería tus besos
buscaba promesas,
y hallé en tus palabras
inmensa tristeza.
Dejabas tu casa,
familia, tu tierra;
me dejabas sola
quizá no volvieras...
¡Quien sabe si el mundo
que da tantas vueltas,
nos unirá un día
en cualquier quimera!
cuando los grillos cantaban,
tu venías solo, y con sentimiento,
tu pena mostrabas.
Buscabas consuelo,
llamaste a mi puerta,
y con alegría
yo te abrí resuelta.
Quería tus besos
buscaba promesas,
y hallé en tus palabras
inmensa tristeza.
Dejabas tu casa,
familia, tu tierra;
me dejabas sola
quizá no volvieras...
¡Quien sabe si el mundo
que da tantas vueltas,
nos unirá un día
en cualquier quimera!
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